2008-01-10
El Teleoperador
"La vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar" decía Forrest Gump en la película del mismo nombre. Pues en el bien remunerado y por todos deseado trabajo de teleoperador es algo parecido, nunca te aburres porque lo único que sabes es que cada llamada será diferente. Al departamento técnico de una conocida empresa de telefonía no solo llegan llamadas con problemas técnicos de teléfono/adsl, sino que más de una vez tendrás que explicar al cliente que el sitio a donde debería haber llamado es al Centro de Atención Comercial (ya que solo necesita contratar un bono), a su banco (para que pague los recibos y se le desbloquee la linea), a Epson (para que le solucione los problemas de alimentación de papel de su impresora) o al médico de cabecera (para que le recete relajantes musculares). Pues bien, una vez dicho esto, de vez en cuando os traeré vivencias personales, algunas difíciles de creer, para que si teneis la desgracia de no trabajar de teleoperador, por lo menos disfruteis de estos bombones.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario